Redacción
Trabajadores del Poder Judicial de México advirtieron este jueves de que mantendrán el plantón en el Congreso para impedir la toma de la presidenta electa, Claudia Sheinbaum, el 1 de octubre, en caso de avalarse en el Senado la reforma para elegir por voto popular a jueces y la Suprema Corte.
Óscar Alonso Yáñez, coordinador técnico-administrativo de juzgado y vocero de la base trabajadora de la judicatura, dijo a EFE que, a la par del campamento que recién se instaló en el Senado, continuarán el plantón que lleva más de dos semanas en la Cámara de Diputados, donde será la investidura de Sheinbaum.
“Aquellas instalaciones no las vamos a soltar, porque después de esto (la discusión en el Senado) viene el 1 de octubre, y es importante porque es la toma de protesta de la presidenta electa, que en ese momento se convertiría en la presidenta constitucional, y ahí vamos a estar”, avisó Yáñez.
El trabajador judicial comentó que esperan que Sheinbaum se presente en la sede legislativa porque necesitan ser escuchados y “ella tiene la facultad” de hacerlo
“Ella tiene la oportunidad de abrir comunicación, de escucharnos, y que todo entre en calma(…) Entonces esperemos que así sea y estaremos ahí firmes”, agregó el vocero.
Como acto protocolario de la investidura, Sheinbaum anunció que acudirá al Congreso el 1 de octubre para el cambio de banda presidencial, en relevo del presidente saliente, Andrés Manuel López Obrador.
Luego, en su primer día de Gobierno, Sheinbaum planea recibir a mandatarios de otros países en el Palacio Nacional y realizar un mitin para informar de su programa gubernamental en el Zócalo capitalino.
Yáñez consideró inviable que busquen una sede alterna para el cambio de banda presidencial.
“Me parece que el protocolo marca que tiene que ser ahí. De tal suerte que estaremos firmes”, aseguró.
Agregó que los trabajadores judiciales de los 32 estados del país que están instalándose alrededor del Senado también participarán en el plantón del Congreso y harán relevos hasta la investidura de Sheinbaum.
“Hay suficiente gente, suficiente ánimo, suficiente convicción de lo que estamos haciendo, por qué lo estamos haciendo, y eso nos mantendrá hasta si es necesario, el 1 de octubre”, afirmó Yáñez.
Asimismo, insistió en que no están en contra de una reforma que realmente acabe con la corrupción en el sistema de justicia, comenzando por las dependencias a cargo del Ejecutivo.
“Las fiscalías y los ministerios públicos pertenecen al Poder Ejecutivo y es ahí donde encontramos la mayor corrupción”, señaló Yáñez.
“Tú vas y presentas una denuncia y deben integrar una carpeta de investigación, (pero) la integran mal, la presentan ante un juez y no prospera (…) tienen que capacitar a ese personal”, ejemplificó.
La reforma judicial impulsada por López Obrador está a un voto de avalarse en el Senado, tras aprobarse el miércoles en la Cámara baja, en medio de protestas de trabajadores judiciales.