Pese a las diferencias entre México y Estados Unidos a razón de la reforma al Poder Judicial, el presidente Andrés Manuel López Obrador, aseguró que la próxima presidenta de México, Claudia Sheinbaum, no tendrá ningún problema con quien quede en la presidencia de ese país.
“Cualquiera que sea el resultado de la elección en Estados Unidos, va a tener con Claudia muy buena relación. No va a haber ningún problema, ella es una mujer muy inteligente, muy bien formada, con experiencia, honesta. Es mujer, es muy sensible (…)”, aseguró.
Durante su conferencia mañanera de este jueves en Palacio Nacional, el mandatario añadió al respecto que “no puede haber una ruptura porque nos necesitamos mutuamente. No es que un país pueda castigar a otro. Ya no, ya pasó ese tiempo. Es que tenemos una relación económica comercial esencial. Entonces, tienen que darse en condiciones de igualdad”.
Aseveró que la integración económica de Norteamérica es benéfica para los tres países que integran el Tratado México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) y hay que mantenerla.
Económicamente, dijo, eso está demostrado “(…) y nos conviene a nosotros fortalecer el mercado”.
El asunto está, dijo, “en que aprendamos a respetarnos para que no se mal interprete, que no se piense que integración económica es dependencia o pérdida de soberanía. Ahí es donde está el asunto, la sustancia, el detalle, el meollo”.
Y es que la iniciativa de reforma al Poder Judicial que ya fue aprobada en la Cámara de Diputados y se turnó a la Cámara de Senadores para su aprobación, ha generado comentarios adversos a la relación entre los países por parte del sector diplomático y representantes comerciales.
Y aunque dijo que mantener la relación comercial sin intervenir en la soberanía, en este caso, “no es un asunto sencillo”, depende de mucha madurez de los gobernantes, de mucha responsabilidad”.
